ADN-702 In Front Of Her Husband [Hentai Live Action][Sin Censura][Descarga Mega y Mediafire] Online

 

ADN-702: In Front Of Her Husband – Evil Pleasure Hikari Kisaki

En un tranquilo suburbio de Tokio, Noriko, una ama de casa de curvas voluptuosas y cabello castaño ondulado interpretada por la seductora Hikari Kisaki, lleva una vida monótona junto a su esposo devoto, un oficinista común llamado Takumi. Todo cambia cuando Jojima, un vecino obsesivo de mirada depredadora y cuerpo atlético, la ve pasar por la calle. Fascinado por su gracia felina, comienza a espiarla: roba su ropa interior del tendedero, oliendo la tela impregnada de su esencia mientras se masturba furiosamente en la oscuridad de su habitación. Su deseo crece como una fiebre incontrolable, impulsándolo a irrumpir en su hogar una noche lluviosa, mientras Takumi duerme plácidamente en la habitación contigua.

 

image host image host image host image host image host

 

Información:

Título completo: ADN-702 In Front Of Her Husband – Evil Pleasure Hikari Kisaki
Protagonista: Iwasa Mei
Estudio: Otona No Drama
Fecha de estreno: 2025-11-04
Peso: 4.2 gigas
Duración: 97 minutos
Censura: No
Formato: mp4
Calidad: Excelente
Uploader: Bunnygirl
Contraseña: colitahentai

¡Descarga Sin Publicidad!

What's it?
It's simple, here the donors have exclusive access to the download links bypassing shorteners and advertising.

¿Qué es esto?
Es simple, aquí los donadores tienen acceso exclusivo a los links de descarga sin pasar por los acortadores ni ningún tipo de publicidad.

More Info / Más Información  

 

Enlaces con Publicidad:

 

DropDownload:             Opción 1   Opción 2   Opción 3   Opción 4

Descarga Mediafire:      Opción 1   Opción 2   Opción 3   Opción 4

Descarga Mega:             Opción 1   Opción 2   Opción 3   Opción 4

Descarga Keep2share:   Opción 1   Opción 2   Opción 3   Opción 4

Online por Colitatube

 

 

Jojima la arrastra al salón, rasgando su camisón de seda con manos temblorosas de anticipación. Noriko forcejea, sus ojos llenos de terror, pero él la inmoviliza contra el sofá, presionando su peso sobre ella. Con urgencia animal, separa sus muslos temblorosos y penetra su entrada húmeda de un solo embiste profundo, estirándola con su longitud endurecida. Ella ahoga un grito, mordiéndose el labio mientras él bombea con ritmo salvaje, sus caderas chocando contra las de ella en un vaivén que hace crujir los resortes del mueble. Fluidos se derraman con cada thrust, lubricando la invasión que la obliga a arquearse involuntariamente. Takumi, despertado por los ruidos, irrumpe y queda paralizado, atado y amordazado por Jojima, obligado a presenciar cómo su esposa es tomada sin piedad.
La humillación se intensifica en la alcoba matrimonial. Jojima obliga a Noriko a cabalgarlo frente a los ojos desorbitados de Takumi, sus pechos rebotando con cada descenso sobre su miembro palpitante. Ella, entre sollozos, siente un calor traicionero crecer en su interior: sus paredes internas se contraen alrededor de la intrusión, succionándolo más profundo mientras gime contra su voluntad. “Míralo, tu marido ve cómo te deshaces”, susurra Jojima, pellizcando sus pezones endurecidos hasta que chorros de placer la traicionan. Takumi, con lágrimas furiosas, no puede apartar la vista mientras Jojima la voltea a cuatro patas, embistiendo su retaguardia con lubricante improvisado, estirando ese orificio virgen en embistes alternos que la hacen convulsionar en un orgasmo prohibido.
Las noches siguientes se convierten en un ritual de dominación. Jojima regresa a medianoche, forzando tríos donde Takumi es espectador impotente. En una escena culminante, ata a Noriko a la cama con sus propias medias, abriéndole las piernas para lamer su clítoris hinchado con lengua experta, succionando hasta que ella chorrea sobre su rostro. Luego, la penetra por delante mientras introduce dedos en su entrada posterior, sincronizando para llenarla por completo. Eyacula dentro de ella en chorros calientes, marcándola mientras Takumi observa el semen goteando por sus muslos. Noriko, rota al principio, comienza a anhelar el éxtasis oscuro: se masturba en secreto recordando las invasiones, sus dedos danzando sobre pliegues sensibles hasta explotar en suspiros ahogados.
El clímax llega en la cocina familiar, durante una cena tensa. Jojima irrumpe, desnudando a Noriko sobre la mesa y penetrándola con furia mientras Takumi come en silencio. Sus gemidos llenan el aire: “¡Más fuerte!”, grita ella, traicionando su matrimonio en un torrente de placer malvado. Él la folla en posiciones variadas —contra la encimera, sobre el suelo frío— culminando en una doble penetración con un juguete vibrante que la hace squirtear sobre los platos rotos. Takumi, humillado, se excita en secreto, masturbándose en las sombras. Al final, Noriko abraza su nuevo vicio, besando a Jojima con lengua entrelazada mientras su esposo se retira derrotado. Este placer perverso, forjado en la traición, la transforma en una adicta al abismo del deseo inconfesable, dejando su hogar impregnado de secretos húmedos y prohibidos.